"TAKEN" DE HÉCTOR FALCÓN, EGRESADO DE LA ESCUELA NACIONAL DE PINTURA, ESCULTURA Y GRABADO "LA ESMERALDA", PERMANECERÁ HASTA EL PRÓXIMO 6 DE MARZO EN LA GALERÍA ENRIQUE GUERRERO (HORACIO 1549, POLANCO).

Fotografías: RENE ENRÍQUEZ

_

La pintura, como una de las primeras manifestaciones plásticas del hombre, ha tenido muchas re-formaciones, en el sentido en que una disciplina se somete a una propia búsqueda, cuestiona y conceptualiza sus procesos, su función y su impacto en el mundo de las imágenes.

Dentro de las corrientes en la pintura -que había sido “asesinada” con la modernidad-, ha existido más de una vez aquellos que pretenden generar una “nueva era en la pintura”, desde el colectivo BMPT, la Pattern Painting, hasta los hiperrealistas, por mencionar algunos ejemplos.

_

_

HectorFalcon_8

_

El pasado 16 de enero se llevó a cabo un pre-view de “Taken”, una exposición que muestra el más reciente trabajo del artista visual Héctor Falcón en la Galería Enrique Guerrero, la cual trata de ser una evolución en la forma de concebir la pintura en México.

Después de 8 años de haber abandonado esta disciplina y dedicarse a un –arte del cuerpo-, en el que Falcón se utilizó a él mismo como “lienzo” para sus obras, el artista presenta en esta muestra una serie de cuadros y piezas tridimensionales en los que reina la acción física y mental tanto en los procesos, como en la conceptualización e incluso en el espectador.

Una pintura que quiere saltar al campo escultórico, es lo que notamos en la solución compositiva de los cuadros, bastidores sobre bastidores que a su vez se encuentran cortados/seccionados (partes tomadas, “taken”) y que permiten al espectador tener una lectura que involucra no sólo -fondo-figura-, sino incluso “soporte”, pues los orificios cortados a precisión nos permiten llegar a las maderas que sostienen la pieza.

_

HectorFalcon_18

 

HectorFalcon_4

_

Teniendo como hilo conductor el –círculo-, en las piezas tridimensionales encontramos a éstos en diferentes diámetros y observamos composiciones concéntricas que siempre nos permiten entrar más y más al soporte. En el caso de los libros llevados a piezas escultóricas, pareciera que los cortes configuran especie de túneles por los que el espectador es invitado a transitar.