EL TIMBRE POSTAL DEL STC METRO ES UN DOCUMENTO DE LA MANCUERNA ENTRE DISEÑO GRÁFICO Y OBRA PÚBLICA OFICIAL, ALGO CONSTANTE EN MÉXICO EN LA DÉCADA DE 1960, Y DE UNO DE LOS SUCESOS QUE TRANSFORMARÍA PARA SIEMPRE A LA CIUDAD DE MÉXICO.
Lunes 14/08 2017
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FOTOS: Cortesía
TEXTO: Aldo Solano Rojas_
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Tal vez uno de los acontecimientos más importantes para la Ciudad de México en el siglo XX fue la construcción del Sistema de Transporte Colectivo Metro (STC Metro). Era septiembre de 1969 cuando los usuarios de la Ciudad empezaron a moverse de manera distinta. La gran novedad que representó el metro llegó incluso a las canciones de Chava Flores; se fabricaron juguetes del Metro, la gente se empezó a citar “en el reloj” y de pronto todo mundo vivía “por el metro Cuauhtémoc”, o “por el metro Revolución”.
Como es bien sabido, el diseño gráfico de toda la imagen del STC Metro estuvo a cargo de Lance Wyman, el mismo responsable de la imagen de los juegos olímpicos de México 68 y muchos otros proyectos gráficos como el del Hotel Camino Real, el Presidente Chapultepec, la tienda DeTodo, etc. Además de la imagen del Metro Wyman diseñó el timbre conmemorativo de su inauguración. El diseño de la estampilla conmemorativa está muy de cerca de la serie preolímpica y olímpica, sin embargo hay algunas diferencias.
El éxito de esta estampilla está, al igual que en las otras series de Wyman, en el tratamiento del timbre como si se tratara de un póster de tamaño grande: del mismo modo que en los olímpicos, el logo está en un registro aparte del diseño central, poco texto pero en letras grandes señalan de qué se trata el timbre. Además de presentar al logo del Metro, Wyman utiliza la tipografía de todo el sistema de señalética, de esta forma el diseño corporativo sale de las estaciones e incluso de la ciudad en forma de estampilla; se está anunciando al mundo todo el ejercicio de diseño detrás del Metro.
Así mismo, el tamaño de la estampilla hace alusión a la forma alargada y horizontal de los trenes, esto se hace aún más evidente al presentar a dos vagones surcando el timbre por la mitad. A manera de granja de hormigas, se sitúa al lector de la estampilla en un corte transversal, el metro avanza en un túnel de concreto debajo de la Ciudad de México. El convoy, con su inconfundible color naranja está apenas entrando en la estampilla, y dialoga con el brillante logo del Metro, la M sólida, símbolo de las tres primeras líneas que atravesarían a la Ciudad. Dentro de los trenes, gente en color verde, negro y naranja viajan por la oscuridad.
A diferencia de la serie olímpica, este timbre funciona de manera individual, no se continúa con las filas cuando está en la planilla entera, sin embargo no hace énfasis en su individualidad, el túnel sigue de un lado al otro, estampilla con estampilla. Esto se puede deber a que el convoy del metro tiene 9 vagones, sería imposible ilustrarlos a todos en una sola estampilla; además, al presentarlos a los vagones entrando al túnel, literalmente se está dando a conocer por primera vez el STC Metro que entra en escena.
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