LA MÁS RECIENTE COLECCIÓN DE YAKAMPOT SE INSPIRA EN UNA HIPOTÉTICA ACOMPAÑANTE DE SIGMUND FREUD, PARA REVISAR EL SIGLO QUE NOS PRECEDE CON SUS CONTRASTES Y DUELOS COMO PUNTOS FOCALES.

Miércoles 18/02 2015
_
_

FOTOS: Cortesía Yakampot

_

Belleza, duelo y Freud, convergen en la colección primavera/verano 2015 de Yakampot, a través de la cual su director creativo Francisco Cancino, reflexiona sobre los acontecimientos que definieron el siglo XX, marcado por los gélidos vientos desatados durante las devastadoras guerras, que parecieran permanecer al regreso de la primavera y su belleza perecedera.

Retomando elementos y detalles que recuerdan la moda en Europa a principios del siglo pasado y una sobria selección de color, Yakampot presenta una hipotética acompañante de Freud, quien lo sigue en una revisión del siglo pasado, donde grandes guerras y actos violentos contrastan con los avances tecnológicos y científicos, la lucha por la libertad, los derechos y la emancipación de la mujer.

La primavera siempre vuelve, pero desde la Primera Guerra Mundial pareciera que su esplendor no ha sido el mismo. Sin embargo, en medio de la guerra en 1915, Freud se cuestiona sobre si la transitoriedad de la belleza destruye su trascendencia, descubriendo que es en realidad esta transitoriedad la que le otorga trascendencia.

Yakampot_16

Yakampot_15

Yakampot_08

Yakampot_03

Una planta que florece tan sólo una noche, se considera más bella precisamente por su fugacidad, y una obra de arte aun reducida a cenizas no elimina su belleza. Al hablar de lo bello no se puede ignorar el dolor; el duelo que genera la pérdida de aquello que consideramos bello, el darnos cuenta que todo siempre tiene fecha de caducidad.

Yakampot_13

Es a partir de ahí que surge esta colección que recuerda que la humanidad ha pasado por muchas primaveras rodeadas de invierno, resultando en prendas que no han dejado de todo los rasgos invernales, e incluso incorporando algo del guardarropa masculino de la época, para expresar la difuminación del ideal femenino.

El uso de elementos mexicanos trabajados en colaboración con artesanos que ha distinguido a Yakampot, se mantiene constante para así explorar, a través de los ojos de México, la transitoriedad de la belleza del siglo acontecido, del cual para muchos el duelo persiste.