El diseño en 2019, un recuento local

En febrero de 2018 escribí un texto referente al estado del Diseño en nuestro país en donde resaltaba lo maravilloso que me resultaba en ese momento. Hablaba sobre lo impredecible de nuestro contexto y cómo esta condición nutría nuestras voluntades creativas. Después de la cúspide que fue el año 2018 para el ámbito, me posiciono hoy como una crítica que lo revisa desde una nueva adversidad: la desaceleración económica generada por procesos de profundos cambios políticos y sociales (dentro de los que nos encontramos liados y confundidos). La falta de apoyos a la cultura de la nueva administración en aras de la austeridad ha sido tajante. Esto ha puesto freno y en riesgo, precisamente aquella celebrada floración no solo del Diseño en México, sino de todo el ámbito creativo y cultural.

Las nuevas condiciones migratorias –las del norte al sur en este caso–  empiezan a generar climas más competitivos dentro de nuestras esferas creativas. Dichos movimientos marcan nuevas pautas y demandan cambios de nuestra ya tatuada capacidad de adaptación. No es poca cosa decir que en México viven cerca de 1.5 millones de expats y que mucho de este asombroso número se nutrió en 2018 de gente joven que busca mejores condiciones de vida. Mientras que participa dentro de sectores creativos emergentes como el del la tecnología, principalmente. 

Dicha cúspide, que también he llamado consolidación, nos entregó la visibilidad que nos colocó en una posición privilegiada: como punta de lanza del movimiento de Diseño Social en Latinoamérica. Recapitulando, hoy puedo sentirme orgullosa de que mis predicciones sobre las tendencias que iban a identificar al diseño contemporáneo  dentro de un discurso global, fueron atinadas: ya se reconoce a México como líder dentro de el rubro del Diseño Social, discurso correctamente establecido para celebrar la designación de la Ciudad de México del World Design Capital 2018, por ejemplo. 

2019

Hoy estamos aquí: En un país en donde la seguridad social es uno de los pilares más endebles de la institución mexicana, el contexto demanda más del diseño: éste se complica al convertirlo en una herramienta que no puede ser solo un placebo estético o un producto que tenga una mera finalidad comercial. Lo utilitario del diseño se traslada hoy al entenderlo para que cumpla la función de herramientas más complejas. Que pueda ayudar a alcanzar una mejor calidad de vida y que impulse el desarrollo económico de sociedades vulnerables.

Diseño Social es también diseño incluyente y accesible, de género; diseños que apoyen la difusión, desarrollo y preservación de la cultura, la educación, la salud, la democracia y de suma importancia hoy, el medio ambiente. Éste es el rubro que más se ha fortalecido dentro de nuestro país. Que esta tendencia de Diseño sea lo que se apremia en los últimos años, habla también de resiliencia y es congruente con nuestro contexto. 

Desde lo oficial…

Dicha definición de Diseño Social es tomada de la convocatoria de la Bienal Nacional de Diseño del INBAL, uno de los pocos concursos que celebra lo mejor del Diseño  hecho en México o por mexicanos. En esta ocasión, la convocatoria pidió ex-profeso proyectos con altos indicadores de aspectos sociales para los postulantes como parte de tres categorías de la misma convocatoria. Esto es definitivamente un buen indicador de que el discurso oficial está finalmente dando una dirección atinada. Desde mi punto de vista, es esto lo que vale la pena generar dentro de nuestro contexto e influir en los diseñadores hacia el futuro.

Quien no entienda que el Diseño es una herramienta de transformación en distintos campos y quien no lo tome desde una mayor amplitud, estará siendo relegado como diseñador. La disciplina se complejiza mientras que paradójicamente, el mercado todavía no se ha solidificado y ha golpeado mucho a los creativos. Asunto particular de otro texto…

Desde lo educativo…

Un diseñador que entiende este particular reto es Moisés Hernández, uno de los más destacados Diseñadores Industriales de su generación (y del país). Recientemente fue apuntado por el Tecnológico de Monterrey como Director Regional del Departamento de Diseño, que incluye los campus Ciudad de México, Estado de México y Santa Fe. En breve entrevista Hernández clarifica su objetivo como líder académico: 

El diseño está cambiando. Mi responsabilidad como Jefe Regional del Departamento es que el alumno entienda la complejidad del contexto en el que vivimos actualmente y que entonces, pueda asumir su responsabilidad como diseñador. Explicamos al alumno todas las posibilidades en donde el diseño como herramienta puede ayudar en distintos ejes: comerciales, sociales, negocios. Le mostramos al alumno todas esas posibilidades.

Con uno de los mejores cuerpos de profesionales que practican como docentes, el programa de Diseño se muestra flexible y responsivo a las condiciones contextuales. Este es uno de los mejores indicadores dentro de las formaciones de nuevos diseñadores y que entienden el Diseño dentro de este nuevo nivel de complejidad.

Desde la arquitectura… 

No es noticia que Arquitectos establecidos como Tatiana Bilbao y José Castillo piensan activamente sobre el rol de la vivienda social. Mientras que en México, las políticas de vivienda panista de los dosmiles dejaron violentos estragos de un capitalismo rampante dentro de este sector. Desde lo público, la generación del Centro de Investigación y Desarrollo Sostenible CIDS del INFONAVIT ha sido un caso de éxito en la investigación enfocada en promover nuevas políticas de vivienda hacia el futuro.

Como buen ejemplo, el CIDS ideó un Laboratorio experimental de Vivienda en Apán, Hidalgo. De  convocatoria abierta, el concurso invitó a re-pensar el modelo de vivienda social desde el contenedor y también, desde el contenido. Hoy el extinto CIDS, publicó en conjunto con Arquine un libro-compendio llamado 1,213 en donde incluyen a los 32 ganadores de Apán y también otros muchos casos de vivienda social. Este cúmulo de información es valiosísimo tanto para diseñadores como para tomadores de decisiones en torno a temas tan importantes como vivienda social. Diseño Social más informado para soluciones que ofrezcan una prospección de futuro más sólida que la que tenemos hoy en día como perspectiva. 

Desde las plataformas…

Por primera vez, percibo que el AMD tiene una intención curatorial más dirigida. Su intención es de establecer un discurso que tiene que ver con Diseño Social, pero desde una perspectiva democrática en el sentido de diseño para todos. Esta inclinación la ha promovido Mario Ballesteros como curador desde su dirección en Archivo Diseño y Arquitectura. En este caso, se podría pensar que el AMD entiende al Diseño dentro de este intrincado nuevo marco de variables que dicta el Diseño Social desde un plano más empírico y menos comercial.

Entonces, citando al AMD: “el festival busca presentar el diseño como una herramienta que responde a problemáticas culturales, sociales, ambientales, económicas y políticas que nos conciernen a todxs”. Conservando su esencia colaborativa, revisaremos qué tan exitoso es tener a un equipo curatorial. En este se coordinan a sub equipos al mismo tiempo, casi siguiendo el formato de una bienal de arte. Presiento que vamos a ver muchas cosas sui-generis y que lo vernáculo va a ser sin duda un tema que tendrá mucho potencial. Entender nuestras condiciones como hacedores solo ayuda al enriquecimiento de las prácticas locales. Al mismo tiempo debemos de establecer diálogo con interlocutores de otras latitudes, como también lo marca el AMD.

Finalmente… 

El reconocimiento del ámbito del Diseño sigue surcando la ola. Tuvimos maravillosas noticias del reconocimiento a la creatividad emergente mexicana dentro de la exposición Prince•sse•s de Ville. Esta exhibición se presentó durante el verano en el Palais de Tokyo este verano. Y los escaparates también celebraron a marcas de moda mexicanas en Nueva York. Tal fue el caso de Opening Ceremony, al incluir a marcas mas arriesgadas como Roberto Sanchez, Barragán y WWLTD. El diseño hecho en México desde diversos frentes, sigue siendo bien abrazado por la comunidad internacional.

***

Regina Pozo es diseñadora y curadora, dirige Archivo de Diseño y Arquitectura y es la fundadora de TXT.URE.

Este texto forma parte de nuestro primer número impreso y fue realizado en agosto de 2019. Consigue este ejemplar en nuestra tienda en línea y en tiendas de diseño.