CON UNA CONSIDERABLE DISMINUCIÓN DE LOS MATRIMONIOS EN NUESTRO PAÍS, ¿SON AÚN LAS BODAS UN NEGOCIO RENTABLE?

Podría parecer que el negocio de las bodas ya no es rentable. En una generación que cada vez opta menos por esta forma legal, los matrimonios han decrecido en un 21.4% en los últimos 15 años, esto según cifras del INEGI. Ese mismo estudio, publicado a principios de este año, anunciaba el incremento del 136.4% en divorcios durante el mismo periodo.

Pero con cifras desalentadoras sobre el matrimonio, ¿por qué continuar apostando por este negocio? Beatriz Calles, fundadora de la plataforma Mexico Bridal Fashion, cuenta un poco al respecto.

En nuestro país, las bodas aún representa un suceso social. Las familias de ambas partes en muchas ocasiones aprovechan la ocasión para invitar a familiares y amigos que en otro tipos de eventos no considerarían. Y si bien las nuevas generaciones parecen resistirse a esta idea, la verdad es que nuestra cultura da cierto peso a este acontecimiento.

Es importante mencionar que también han cambiado las tendencias en cuanto a edades. Actualmente la gran mayoría de las personas que contraen matrimonio se encuentran entre los 25 y 35 años. Esto ocasiona que ahora los contrayentes cuenten con una posición económica más estable, seis de cada diez personas que trabajan están casadas o en proceso de. 

Beatriz comenta también sobre la “segunda vuelta”. Con un aumento en los divorcios y la perdida del estigma social sobre el tema, muchas personas optan por contraer matrimonio en más de una ocasión. Esto ocasiona que se tenga a novios y novias “con experiencia”, que saben lo que les gustaría mejorar, y en muchas ocasiones, están dispuestos a invertir aún más en la celebración.

En una fiesta promedio se gastan $1,100.00 por persona, según la PROFECO. Aunque algunos wedding planners manifiestan que lo común en personas que solicitan sus servicios es gastar entre $2,000.00 y $5,000.00 por invitado. A esto se debe sumar los honorarios del servicio, los cuales son de aproximadamente el 35% del costo total de la boda. El costo incrementa si se debe viajar para el evento. San Miguel de Allende y Los Cabos se colocan en nuestro país como los principales destinos para celebrar nupcias.

Otro gasto fuerte en el proceso de boda es el vestido de novia. La tendencia actual es usar vestidos que puedan irse modificando a lo largo de las celebraciones -tomando en cuenta un formato tradicional de ceremonia civil, religiosa y fiesta- o bien, usar uno para cada ocasión. Aunque aún es más común que las novias acudan a firmas extranjeras para adquirir su vestido, Beatriz manifiesta que el uso de diseñadores mexicanos va en aumento. Una de las ventajas que esto último representa es poder trabajar de la mano con el diseñador. Esto permite lograr una pieza que vaya con las necesidades y gustos de la clienta.

La importancia de eventos como Mexico Bridal Fashion es acercar a los novios y las novias a todo el abanico de servicios que se requieren para una boda. Desde las argollas de compromiso, hasta la organización del evento y el viaje de luna de miel. La responsabilidad de la plataforma es entender todos los cambios que tiene el mercado en cuanto a consumo. Cambios cómo la aparición de parejas del mismo sexo que representan ya el 0.3% del total de los matrimonios en nuestro país.

Sí, los matrimonios han disminuido. Pero la inversión en torno a las bodas va en aumento, representando un fértil mercado para sus participantes.



  • FOTOS: Alán Morales para MxBF

  • TEXTO: Isra Vázquez

Fecha de Publicación:
Lunes 17/06 2019