El diseño del Martini perfecto

El Martini es uno de los cocteles más icónicos y reconocidos en la cultura popular, guarda un aura de elegancia y misterio a su alrededor. Su origen no se conoce a ciencia exacta. Muchos lugares y personajes presumen de ser “los creadores” de este. Hay algo que sí está definido, sus tres ingredientes principales, que junto con una técnica de mezcla excepcional y la clásica copa martinera, lo han hecho el ícono de la coctelería.

¿Qué es lo que hace a un Martini? Para que el coctel pueda reconocerse como tal, necesita: Vodka, Vermouth o vino aromático y el garnish de elección. A través de su historia la proporción ha variado, así como los ingredientes extras. Por su sencillez,tiene la facilidad de adaptarse a distintos gustos y estilos. James Bond abrió el debat de si el Martini debe ir shakeado o mezclado. Los personajes de Mad Men lo toman en la oficina y Karen Walker de Will and Grace, prefiere no desperdiciar espacio con las aceitunas.

Para esta fecha especial, Belvedere Vodka nos comparte los elementos básicos para preparar desde un Martini clásico a uno que haga uso de estos elementos para mezclarlos de maneras libres y creativas.

La técnica: Shaken or Stirred

Ambas se utilizan para alcanzar la temperatura ideal de los ingredientes. Se diferencian por la oxigenación de los ingredientes al mezclar y el efecto que tiene en el sabor. No hay bueno o malo, es simplemente cuestión de gusto. Lo que sí es básico, es que la temperatura del coctel sea fría.

El sabor: Dry or wet

Esto se refiere a la cantidad de vermouth que agregues a tu coctel. Un Martini seco tiene una proporción de 6:1 en relación a la cantidad de vodka mientras que un wet Martini o Martini suave, tiene 3 medidas de vermouth por 1 de Belvedere Vodka (3:1).

El garnish

El toque final de la preparación, puede ir desde una rodaja de cascara de limón, naranja o toronja, la tradicional aceituna y, ¡hasta sardinas!

La práctica hace al maestro. La receta involucra pocos ingredientes y a partir de atreverte a mezclarlos es que descubrirás cómo te gusta tomarlo. La receta perfecta es la que tú decides hacer.