POÉTICAS SOBRE BARRIALIDAD, COLONIALISMO, GENOCIDIO, MARICONAJE Y RESISTENCIA

Tepito suele aparecer en los medios como el “barrio bravo” de México, el lugar más violento. Sin embargo, pocas veces escuchamos a quienes lo habitan y transforman desde adentro. raza sosa, una marica nacida en Tepito, ha convertido su experiencia en poesía en resistencia. Su primer libro, Pisando Chueco: Escrituras inmundas de una marica tepiteña, fue publicado de forma independiente en 2023 y después elegido por la Minimprenta de Pandeo para su impresión en 2024.

En esta conversación con coolhuntermx, raza habla sobre barrialidad, colonialismo, género, racismo y sexualidad. Es parte de una serie de chismecitos con poetas mexicanes que coordina J. C. D. Calderón. El chismecito busca promover una lectura crítica de la poesía y situarla en el contexto político mexicano contemporáneo.

Mariconaje y barrialidad

JC: Tu poemario abre con “Mariconaje barrial radicalmente ambiental”. ¿Qué significa para ti?

rs: El título nació de un poema que originalmente se llamaba Devenir putrans radicalmente ambiental. Luego elegí mariconaje, inspirado en Pedro Lemebel, porque ya no me identificaba con el devenir trans. Para mí es como un cimarronaje: una manera de resistir, amar y reconocerse como marica barrializada.

JC: ¿Y qué significa nombrar la barrialidad?

rs: El término barrialización viene de la Geografía y de los Estudios Urbanos. Ahí se usa para describir la formación de un barrio como espacio físico. Para mí, el barrio va más allá del espacio físico. Implica entender cómo el cuerpo y el territorio se entrelazan. La barrialización es afectiva, corporal e identitaria. Es una forma situada de pensar cómo se vive y se encarna el barrio.

Tepito, exotización y turistificación

JC: Crecí con la idea de que Tepito era un lugar de violencia y piratería. En cambio, hoy hay tours para beber micheladas y tomarse fotos con “Mayates sexualizados, mulas racializadas, travestis, chacales y jotas barrializadas” (11). ¿Cómo entiendes ese deseo turístico por Tepito?

rs: Este boom turístico no es nuevo. Es una actualización de la exotización y turístificación. La gentrificación crea un Tepito para turistas, con narrativas institucionales —y no sólo institucionales— que lo promueven como símbolo de lo mexicano.

En los 60, la colectiva Tepito Arte Acá ya decía: “México es el Tepito del mundo.” “Tepito es la síntesis de lo mexicano.” Incluso lo ponían en términos religiosos: “Ser mexicano es un orgullo, ser de Tepito es una bendición de Dios”.

La turístificación convierte la vida barrial en espectáculo. Se extrae la estética —piratería, reguetón, cuerpos racializados—, pero no el dolor ni la violencia que vivimos aquí. 

También hay un aspecto histórico que explica el imaginario que mencionas. Tepito viene posiblemente de Tecpitonalco o “mercado chico”. Todo lo que no pasaba los controles de calidad en el gran mercado de Tlatelolco, se vendía en Tepito. Siempre ha sido un espacio marginal para lo que no cabe en el mercado oficial. 

Además, la fayuca, la importación no regulada de aparatos en el siglo XX, viene de las guerras mundiales y el colapso de las economías. Cuando hay crisis, el mercado negro crece, y Tepito ha sido nodo de ese mercado.

Colonización y genocidio

JC: En tus poemas hablas de colonización y genocidio. ¿Por qué usar esas palabras para hablar de Tepito?

rs: Porque el barrio es una ficción colonial. La palabra “barrio” viene del árabe bárri, que significa subdivisión o salvaje. Los españoles usaron esa palabra para nombrar a los calpulli, las unidades tributarias mexicas. El primer proceso de barrialización fue lingüístico: nombrar para colonizar.

Ahora, los Estudios del Genocidio nacen del Holocausto, pero perspectivas críticas decoloniales también nombran el genocidio desde la colonización y la aniquilación de nuestros pueblos. Comparto la idea que la colonización es el primer genocidio. Por eso la violencia en nuestros barrios también puede ser nombrado como genocidio.

Trabajo sexual y afectos interbarriales

JC: ¿Por qué tus poemas hablan de trabajo sexual y no desarrollan demasiado otras relaciones afectivas?

rs: Tengo unos memes inspirados en El Chavo del Ocho, que cuestionan que se puso de moda el barrio, pero no amar a las maricas barrializadas. Amar a una marica racializada también es político. 

También hay una política de afectos interbarriales e intrabarriales. Los afectos en el barrio son cuestión de supervivencia, necesitamos amarnos entre nosotras. Aunque a veces los afectos aparecen áridos, siguen estando ahí.

En el poemario la presencia del trabajo sexual es tan alta porque yo lo vivía en ese momento. “Homosexual de cuatro haches” lo escribí cuando estudiaba en Morelia. Era foráneo, con pocos recursos, y el trabajo sexual, sobre todo online, me sacó de varios apuros. 

Comunidad y prácticas anticoloniales y antirracistas

JC: ¿Cómo fue el proceso de creación de este libro?

rs: Desde las fotos que incluye de Minox Minoty hasta la maquetación en la Minimprenta, todo fue colaborativo. Con Minox hubo esta complementariedad: yo desde la palabra, Minox desde el cuerpo y la imagen. Además, se trabajó en un laboratorio colectivo con Minimprenta: cinco personas que maquetamos, leímos y nos dimos consejos. 

JC: ¿Qué prácticas anticoloniales y antirracistas surgen de este poemario?

rs: Este poemario lo mandé a editoriales en España y en México y a varios concursos. Nunca quedó. No creo que haya sido por la calidad, sino por lo disruptivo que es. Hoy, no me interesa la masificación y agradezco que no se haya publicado ahí. Prefiero que sea un grito comunal, visceral, que circule en lo pequeño. Hoy transita por espacios micropolíticos: encuentros cuerpo a cuerpo, pedirlo por Instagram y entregarlo en el metro. Eso también es una política anticolonial.

***

La voz de raza sosa muestra que Tepito no es sólo violencia ni comercio informal. Es un espacio de memoria, resistencia y deseo. Con Pisando Chueco, raza abre un espacio para pensar el barrio desde la colectividad, los afectos, la historia y el mariconaje.

Lee la entrevista completa:


Fecha de Publicación:
Jueves 16/10 2025