FAMA HA REPRESENTADO DURANTE SIETE EDICIONES UNA APUESTA IMPORTANTE POR DESCENTRALIZAR EL ARTE EN MÉXICO Y ACERCARLO A NUEVAS AUDIENCIAS.
La Feria de Arte Mexicano Accesible (FAMA) se ha consolidado como un punto de encuentro donde la conexión humana es tan importante como las obras en exhibición. Con una frescura distintiva que logra renovar edición tras edición, FAMA atrae a un público diverso y se desarrolla en un ambiente relajado, lejos de convencionalismos, donde el arte fluye de manera accesible y cercano. Esta autenticidad ha permitido construir una comunidad integrada alrededor de arte contemporáneo emergente, en la que artistas, coleccionistas y espectadores comparten un espacio común que fomenta el diálogo y el intercambio.
Pero, ¿qué significa realmente el arte emergente? Podría describirse como una fase de alta productividad en la que los artistas participan en residencias, recorren circuitos de galerías y se comienzan a posicionar en el mercado.
Una Feria para Todos
FAMA ha representado durante siete ediciones una apuesta importante por descentralizar el arte en México y acercarlo a nuevas audiencias. Cerca del 50% de lxs artistas exhibidos son de Monterrey, y el resto viene de otras partes de México y el mundo.
La feria también cuenta con actividades que van desde talleres como el de Artefacto: Speed Portrait o Mobile Tile, hasta experiencias como la Pantomima de Boon Bookstore y performances con artistas como Lila Pesadilla, quien presentó “Fantásticx Fantasea” en colaboración con Innvictus.
Artistas, Proyectos Invitados y Comunidad FAMA
En FAMA, el diseño de los booths, dispuestos en diagonales, guía a los asistentes hacia un punto central donde la experiencia artística se amplía con charlas, happenings y performances. En muchas de las piezas se percibe claramente la esencia del norte; se nota en el carácter robusto de las formas, en los temas y en los materiales que evocan la vida y el entorno de esta región.
Entre las propuestas artísticas vimos obras de Alejandro Castañeda, quién explora la identidad a través de elementos urbanos. Laura Mellado trabaja con materiales orgánicos en textiles, integrando lo natural en su obra. Tonto Toys sorprende con su inspiración en la cultura japonesa Gachapón, haciendo del coleccionismo una experiencia divertida y accesible. Vange Taméz, por su parte, presenta Oscilaciones Corpóreas, una serie en cerámica que investiga la conexión entre cuerpo y mente, y So Cabrera expone Filo para volar, abordando la urgencia y el impulso de crear.
También la feria se enriquece con proyectos invitados que expanden el alcance y el contenido de la muestra como Arde Arte , Arquitectas MX , CFE (Comisión Federal Estética) a y “Una Fina Selección de Pensamientos Extraordinarios” de Marco Treviño.
Otra Sección a destacar es FORMA, una muestra de artistas que ya forman parte de la comunidad fama y que se han presentado en otras ediciones, este espacio busca seguir creciendo y fomentando la comunidad FAMA.
Coleccionismo Emergente: Una Apuesta por el Futuro
FAMA no solo es una plataforma para artistas emergentes, sino que también fomenta el coleccionismo de nuevos talentos. Iniciativas como Colección Abierta, esta ocasión se presentó la colección de Gloria Cárdenas curada por Beto Díaz, la intención es seleccionar y exponer piezas de una colección privada, con el objetivo de acercar el arte a más personas y explorar el impacto de las colecciones en nuestra sociedad.
En esta FAMA se pueden encontrar precios que van desde los $2,500 MXN hasta los $90,000 MXN, la feria permite a un público diverso comenzar su camino en el coleccionismo de manera accesible.
Además, en colaboración con Museo Marco y Banregio, que también busca impulsar el talento emergente local, la feria lanzó la convocatoria “Horizontes Temporales: Visiones a Través del Tiempo”, un concurso de fotografía que busca capturar la transformación de Nuevo León. La fotógrafa Verónica Mar, flâneuse mexicana y artista visual, fue la ganadora. Su obra destaca por capturar relaciones entre la ciudad y sus habitantes.
FAMA tiene como uno de sus objetivos continuar siendo una feria boutique con una selección de no más de 40 artistas, manteniendo un ambiente íntimo y cercano que fomente el descubrimiento y el intercambio.
—¿Si la Feria fuera una obra de arte en sí cómo sería?
“Sería una escultura en el espacio público que dialogue con el que transita, me imagino acero, pero un acero que ha tomado una forma sin esquinas o picos, como doblar un poco la rigidez del material, de las cosas”
Catalina Escamilla.
FAMA nos invita a redescubrir el arte con una mirada fresca, a sentir que el arte es algo que merece ser explorado, compartido, coleccionado y, sobre todo, celebrado en comunidad.
¡Nos vemos en la siguiente edición!