

CADA PLATILLO SE CONSTRUYE EN TORNO AL ARROZ PEGAJOSO Y UNA CUIDADOSA SELECCIÓN DE HIERBAS, ESPECIAS Y VERDURAS FRESCAS, LOGRANDO UN EQUILIBRIO ENTRE LO ÁCIDO, LO PICANTE Y LO UMAMI
En el instante en que cruzamos a Ladyboy, la Ciudad de México queda atrás. Las luces, el murmullo de conversaciones entremezcladas con el sonido del wok al fuego y el aroma de hierbas frescas nos transportan de inmediato a un rincón bullicioso de Bangkok. La esencia de la comida callejera tailandesa ha sido capturada aquí con una fidelidad sorprendente, en un ambiente que huele a especias, carbón y tradición.
Autenticidad con cada bocado
Ladyboy es una declaración de amor a Tailandia, inspirado en los sabores de Isaan, una región vibrante del noreste tailandés, su cocina apuesta por la frescura y la intensidad. Cada platillo se construye en torno al arroz pegajoso y una cuidadosa selección de hierbas, especias y verduras frescas, logrando un equilibrio entre lo ácido, lo picante y lo umami. No es una adaptación al paladar mexicano, es Tailandia en su esencia pura.
La cocina que cruza fronteras
El alma de este espacio está en sus creadores: un equipo de amigos tailandeses, mexicanos e italianos que decidieron unir culturas. Para garantizar autenticidad, enviaron a sus chefs mexicanxs a un viaje de tres meses por Tailandia. De esta manera, aprendieron directamente de cocineros callejeros, mercados locales y restaurantes icónicos. El resultado es un menú que no teme ser fiel a sus raíces, evolucionando constantemente con ingredientes de temporada y un wok de arroz que cambia cada semana.
Mucho más que un restaurante
No solo se trata de comida. La experiencia Ladyboy está diseñada para sumergir a los comensales en la atmósfera vibrante de Bangkok. La decoración incluye más de 400 kilos de elementos auténticos traídos desde Tailandia: morteros, amuletos y objetos de mercados callejeros. Y como guiño perfecto, un tuk tuk original recibe a los visitantes, funcionando no solo como parte del espacio, sino también como transporte para productos y colaboraciones con otros proyectos de la zona.
***
Salir de Ladyboy es volver a la CDMX con la sensación de haber viajado sin despegar los pies del suelo. Pero la experiencia no termina con la última cucharada: este es el tipo de lugar que deja huella, que invita a regresar y a seguir descubriendo. Porque en Ladyboy, cada visita es una nueva travesía por los sabores de Bangkok, y la nostalgia por el siguiente viaje empieza justo al salir por la puerta.
Vísitales en Roma Norte (Durango, 140). Martes-Sábado: 5:00 pm – 10:00 pm.
Compartir artículo
Texto: Redacción Coolhuntermx
Fotos: Cortesía
Fecha de Publicación:
Miércoles 05/03 2025
if( have_rows('efn-photos') ) { ?>