La Ciudadela, lugar de tradiciones

Existen espacios en los que se promueven las técnicas artesanales. En la Ciudad de México, la Ciudadela es un mercado de artesanías donde podemos encontrar diversos personajes que han dedicado sus vidas a la preservación de procesos tradicionales.  

Por ejemplo, Martina de la Cruz, proveniente de una comunidad de Hidalgo trabaja el telar de cintura, el cual funciona sujetando un extremo a su cuerpo y el otro en el tronco de un árbol. Las piezas realizadas pueden tomar meses en finalizarse, pero ella puede trabajar hasta con tres calzaderas, lo que le ayuda a crear piezas de doble vista.

Otro personaje en los pasillos de la Ciudadela es Felipe Linares, nieto del creador de los alebrijes y quien aún conserva la tradición de su manufactura. Él nos cuenta que estos personajes surgieron después de que su abuelo cayera en una grave enfermedad que provocaba alucinaciones. Cuando recuperó la salud se vio en la necesidad de trabajar a marchas forzadas para recuperar dinero que había perdido. Era cartonero de profesión, por lo cual decidió replicar las criaturas que vio durante su enfermedad. Estas figuras fueron popularizadas por personajes como Frida Kahlo y Diego Rivera.

René Ángeles es otro de los artesanos en la Ciudadela. Él se especializa en la técnica del taraceado, la cual consiste en el trabajo de la madera. Lo más popular son las máscaras, las cuales son talladas, pintadas e incluso incrustadas a mano. René es el último de su familia que decidió seguir esta tradición.

Y este es un problema al que se enfrentan muchas de las técnicas artesanales, pues debido al gran esfuerzo que implica y la poca remuneración económica que trae, muchos jóvenes deciden no interesarse por estos procesos. Tequila Don Julio es consciente de esto e invitó a artesanos y creativos contemporáneos a realizar duplas.

En medio de este escenario lleno de historia y tradición la marca de tequila presentó creaciones culinarias, artísticas, de indumentaria e incluso instrumentos musicales, que combinaron elementos ancestrales de nuestra cultura con modernas interpretaciones.

Victoria Eugenia, diseñadora de alta costura que usa técnicas tradicionales, hizo mancuerna con Trista para elaborar un vestido, combinando la silueta femenina característica la marca con el bordado tradicional.

En palabras de Victoria Eugenia, “este tipo de colaboraciones representa un reto”, además de mostrar la importancia de las tradiciones y lo conveniente de la modernización de procesos.