DISEÑADORA, PROFESORA, BLOGGER. NATALIA RUÍZ ES UNA DE LAS CHICAS QUE TRABAJAN POR Y PARA LA INDUSTRIA DE LA MODA EN LA CIUDAD.

Intentar definir cuál es el proceso de desarrollo de un diseñador en México no es fácil. Hoy en día nustra mente siempre intenta pensar en grande, en la fama y la popularidad de un nombre. Nosotros lo qué intentamos hacer es dar -voz- a esas personas inspiradoras que van por las calles, que trabajan y tienen empleos encantadores. Hoy: Natalia Ruíz.

Diseñadora, profesora, blogger. Natalia Ruíz es una de las chicas que trabajan por y para la industria de la moda en la ciudad. (Tengo que decir qué conozco a Natalia desde hace ya tiempo, de una personalidad misteriosa -siempre honesta, siempre amable y siempre simpatica- porque su mirada reflejará mucho más de lo qué pueda llegar a decir verbalmente-.)

La cita se acordó un jueves a medio día, en un pequeño sitio -famoso por su pasta y el viernes de 2×1 en capuccinos-: Expresso Café. Sentados en el área de fumadores -esquina de Colima y Av. Insurgentes en la colonia Roma- y observando como el metrobus corre uno tras de otro, muy puntual Natalia Ruíz, muy guapa en un vestido camisero a rayas de Urban Outfitters se presenta a nuestra cita.

“Natalia es segura al caminar, alta, guapa… pero también tiene ese halo de timidez que hace considerarle; Natalia es de esas pocas chicas que aún se mueve con propiedad y feminidad, toma café exquisitamente y pareciera -le conoces de tiempo atrás-… Con esas consignas empezamos nuestra charla con ella”:

…empecemos desde el principio ¿Cuántos años tienes Natalia?

-Tengo 24 años, -pero en unos días más cumplo 25-. Nací en el Distrito federal, pero cuando era muy pequeña mis papas nos mudaron a San Fransisco California; estuve ahí hasta los 10 años y después volvimos a la ciudad de México. Cuando llegué e inicie las clases no sabía hablar español -porque me la pasaba hablando en inglés-, fue traumático (risas) quería regresarme.

¿Qué estudiaste?

-Estudié diseño y comunicación visual en la ENAP y me especialicé en Diseño Editorial.

¿y qué sucedió después de terminar la universidad? ¿cual fue tu primer empleo en moda?

-Al terminar el período de la universidad, comencé a realizar mi tesis y en ese período fui a una entrevista y dos meses después me llamaron -creí que no me llamarían nunca- pero así inicié como ‘trainee’ en Harper’s Bazaar. Comencé apoyando en la parte editorial, en moda; -trabajé también con Annia Ezquerro y Marina Muñoz con quienes hice algunos shootings-. Después me trasladaron a la parte de diseño gráfico, pero en realidad pasaba muchas horas frente a una computadora haciendo la parte de edición de fotos-diseño y demás; -y fue entonces que quería regresarme a la parte de estilismo porque me gustaba mas-, pero en ese momento no había vacantes en esa área, así que estuve unos meses más en la editorial y decidí salirme.

¿fue entonces cuándo empezaste con JPEG?

-Sí, a las 2 semanas de salí de Harper´s, empecé a maquilar en mi mente la manera de iniciar una marca -siempre quise tener una línea propia (con todo lo que eso conlleva)-. Comencé a pensar en diferentes opciones -en algo que disfrutara hacer-, en todo el proceso y en esa lluvia de ideas me dí cuenta que necesitaba una bolsa grande, donde pudiera llevar mi laptop, mis cosas de arte, etc.. y fue ahí, qué en base a mis necesidades reales (y en las de muchos) decidí iniciar con JPEG.

¿por qué el nombre?

-Lo tomé de la terminación de las imágenes de internet .JPG, pensé que era una buena idea, un nombre pegajoso y fácil de recordar.

¿de dónde sale toda la inspiración?

– Siempre me ha llamado la atención el ‘espacio’, me gustan sus colores, las cosas que sean llamativas y diferentes; pero sin llegar a lo kitsch, de ahí viene mucha de mi inspiración. Hoy en día tengo a la venta el TOTEBAG, la mochila y una mini cartera, pero estoy empezando con una producción de porta iPads y laptops. Me quiero especializar en “maleteria” en algún tiempo.

¿dónde podemos encontrarlas?

-Las pueden encontrar en The Happening, Sicario, en Querétaro en una tienda que se llama Cornelia y Caridad y también se pueden adquirir en línea (www.jpge.mx)

A ver Natalia, en cuanto a moda, ¿Cómo ves el panorama mexicano?

-Yo creo que la industria aún esta en pañales -pero que va a crecer-; en este momento sigue en proceso de crecimiento, el tema de los diseñadores comienza a tomar fuerza. Con la nueva generación de creadores de moda como Maria Vogel, Natalie Amkie y algunos más como Roberto Sánchez empieza ya el crecimiento de la moda mexicana. Además, hoy en día las editoriales sacan más productos de diseño mexicanos, siento que va por buen camino.

¿Tienes algún diseñador favorito?

-De diseñadores mexicanos me gusta Natalie Amkie, Nimisnequi, -de María Vogel algunas cosas-. Internacionales Jill Sander, la ropa de Acne y Vivienne Westwood por ejemplo.

¿Cómo ves las revistas de moda mexicana?

– Creo que algunas son muy comerciales; otras están mejor, pero siento que les falta contenido e investigación. De mis favoritas están: Harper´s Bazar, Nylon, Código y 192.

-Nos enteramos por ahí, que tienes un nuevo proyecto-, cuéntanos un poco…

-Sí, se estrenó esta semana, se llama Style&Trends México [www.styletrendmx.tumblr.com],  es un sitio web enfocado en pura moda mexicana, noticias de tendencias, los nuevos proyectos de los diseñadores mexicanos, donde se venden sus productos, nuevos talentos, etcétera. Éste proyecto participan nombres como Salvador Eljure y Olivia Meza.

-Además de todo esto, das clases, ¿cierto?

-Correcto, soy profesora en la UNAM… me gusta y doy clases a chicos de preparatoria en las materias que me especialicé: Expresión artística y Diseño Ambiental. Es una experiencia que a mi me enriquece y bajo este sustento, puedo desarrollar muchos de mis demás proyectos.

Natalia Ruíz  es sin duda una jóven con mucha visión, talento y desición de sobresalir. Como todo diseñador mexicano, tiene la facilidad de realizar diferentes funciones, enfocada en sus múltiples proyectos y siempre aportando a la moda mexicana.

Fue así que -después del capuchino- caminamos ahora hacía Álvaro Obregón; siempre con la amabilidad que caracteríza, Natalia tenía toda una tarde llena de clases y nosotros de trabajo- [Gracias Natz].



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