EN OMORIKA PODRÁS ENCONTRAR PIEZAS ÚNICAS CREADAS A MANO, CON DISTINTOS ELEMENTOS Y DETALLES.

Los textiles creados por Margarita Cantú son realizado con técnicas tradicionales junto a manos de mujeres y hombres expertos en telar y otras aproximaciones textiles como el bordado; en el caso de las mujeres, especialmente en Chenalhó. Las mujeres y hombres que forman esta mancuerna trabajan en diferentes comunidades de Los Altos de Chiapas y San Cristóbal de las Casas.

Margarita, ha tejido la visión y misión de los proyectos que encabeza a partir de momentos y personas inspiracionales en su vida como su abuela; así como su interés en objetos y textiles de culturas originarias a lo largo de México y otros países. Su papá, le legó el uso del color negro como parte de su identidad estética y éste se ve reflejado en su trabajo; así como las múltiples mujeres y hombres que seguramente han dejado huella importante de su formación humana.

Después de haber trabajado para una de las grandes casas en la industria de la moda en Nueva York, decidió tomarse tiempo en verano para visitar San Cristóbal de Las Casas; aprender a tejer en telar de cintura y conocer de primera mano lo que de alguna manera ya intuía, conocía y admiraba, las técnicas artesanales. Once años después, tiene uno de los talleres más grandes y desbordantes de creatividad textil, interpretación y enaltecimiento de técnicas y co- creación.

Detrás de las puertas rojas numeradas con el 67, encontrarás albergado el trabajo de Cantú. Uno de sus proyectos es Omorika, la marca que representa sus piezas textiles portables y en algunos casos decorativos; Y Taller 67, encargado de la diversificación del trabajo de mayor escala.

Omorika

Las piezas de Omorika, son tejidas a mano en telar de cintura y telar de pedal, algunas de ellas tienen elementos brocados o bordados realizados con fibras naturales orgánicas, como lana, algodón, seda o lino; aunque los materiales reciclados le aportan un carácter especial a los artículos que forman su colección; no solamente por el material y el ejercicio de reciclaje, también por su delicada ejecución en los telares.

Materiales como cintas de casetes, bolsas de plástico, lonas de propaganda política, encuentran nuevos diálogos y usos en asombrosos cojines, cosmetiqueras, kimonos, capas o en objetos de mayor tamaño como hamacas y objetos decorativos. Las plumas de gallina también son parte de la estética de la marca; el arte textil plumario en el estado de Chiapas se elabora en Zinacantán. Para Omorika, la inserción de la pluma es una técnica diferente que se trabajó con mucho esfuerzo durante dos años o un poco más, hasta llegar a una característica destreza técnica.

Los procesos artesanales que utilizan, les permiten acariciar de cerca el ideal de “pieza única”. Tiene como bases colaborativas de horizontalidad, los ejercicios honestos en las cadenas de valor, reflejadas en las relaciones humanas duraderas y respetuosas que han forjado un grupo de trabajo.

Adquirir una prenda es toda una experiencia; de pronto te verás atraídx por alguna bufanda exquisitamente tejida y brocada con calaveras, fibras naturales o encantada con un kimono elaborado con bolsas de plástico, mientras admiras la calidad y ejecución delicada de un cojín tejido con cintas de casete.

Cada objeto está firmado, dentro o a un costado con una ligera concha con el nombre de la marca, un nombre que con el tiempo desaparecerá. Como si de repente la misma pieza te reafirma que tu compra, nunca fue un nombre, sino el cúmulo de esfuerzos, constancia, color, atemporalidad, respeto, horizontalidad, técnica, más técnica, estética y ética.

Elementos

Estos son alguos de los símbolos que encontramos en casi todos los diseños: ponchos, alfombras, bufandas, cojinería, capas, kimonos, bolsas:

  • Calavera
    Es un ejercicio unificador, afirmando que todos somos iguales.”La muerte es democrática, ya que, a fin de cuentas, güera, morena, rica o pobre, toda la gente acaba siendo calavera”(José Guadalupe Posada). El diseño del patrón transcrito al telar, como todo lo nuevo fue un proceso que las mujeres retomaron con la gran maestría que tienen desempeñando su técnica.
  • Araña
    Este diseño, es un claro ejemplo de cómo las mismas mujeres van incorporando algunos elementos a sus propios diseños como innovación. Éste fue el caso de la araña que vio la luz en algunos bordados alzados de Chenalhó. Para Omorika, fue otro elemento integrador, que simboliza un pequeño homenaje a la gran tejedora en la naturaleza.
  • Serpiente
    La serpiente es un elemento de carga simbólica fuerte en las culturas mesoamericanas. Y, está presente aquí como símbolo y recordatorio del cambio. La muda de piel. Siempre nos enfrentamos a algún proceso y el trayecto con todo lo que implica, está bien, somos movimiento.
Taller 67

Se encarga de proyectos arquitectónicos, colaboraciones e instalación decorativa, todas piezas exclusivas que utilizan como soportes técnicas artesanales y oficios de talleres en San Cristóbal.

Una vez dentro del taller, no te costará nada reconocer los ejercicios creativos de los cuales se encarga este proyecto, ya que forman parte de la misma ambientación del lugar y que está en constante cambio. Ahí se encuentran coexistiendo prototipos, piezas finalizadas, materiales reciclables, fibras orgánicas, plumas, texturas, formas, formatos de gran tamaño.

Para Margarita, la formación de su proceso creativo es un arte poético de congruencia y consistencia en sus procesos.

Puedes encontrar algunas de sus piezas en el Museo de Arte Contemporáneo (MUAC), Onora Casa, La Marquesa, El bazaar de Sábado, Bergdorf Goodman o las piezas de colección especial que realizaron para Ensamble Artesano o en la sección “Amiga” de la página Caralarga. Si te encuentras en San Cristóbal te serán fácil reconocer sus instalaciones y colaboraciones en algunos hoteles y espacios públicos, aunque tiene también en su archivo de colaboraciones ha realizado proyectos privados.

Visitar su taller, es toda una aventura.


  • TEXTO: Helena Rojas

Fecha de Publicación:
Martes 09/02 2021