LA CADENA DE HAMBURGUESAS QUE NACIÓ EN NUEVA YORK ABRIÓ SU PRIMERA SUCURSAL EN LATINOAMÉRICA, ELIGIENDO LA CIUDAD DE MÉXICO COMO SEDE.
Esta reconocida cadena de hamburguesas se inauguró en 2004 en el Madison Square Park de Nueva York. Hoy cuenta con sucursales alrededor del mundo, desde Londres, Hong Kong, Estambul, Dubai, Tokyo, Moscú hasta Seúl. Para su ingreso a Latinoamérica, han elegido la Ciudad de México.
Además de ofrecer sus platillos y bebidas clásicas, para esta apertura se desarrollaron colaboraciones con marcas mexicanas, los cuales sólo se podrán encontrar en esta sucursal.
“Si viviéramos aquí, ¿a dónde iríamos por chocolate, tacos, cerveza…?”, esa fue la pregunta con la que el equipo de esta cadena partió para buscar proyectos mexicanos para colaborar.
“Caminamos por la ciudad, conocimos gente, probamos todo. Lo más interesante siempre son las cafeterías porque regularmente la gente detrás es muy apasionada y busca esa misma pasión en otros productores. Así fue como conocimos a muchos de las marcas con las que trabajamos para el menú especial en CDMX”, nos compartió Mark Rosati, chef de la cadena.
Esta marca nació de lo absurdo y difícil que era conseguir chocolate real, elaborado desde la semilla del cacao, en la Ciudad de México. La única forma de hacer algo, fue rifarse haciendo su propio chocolate, para que más gente se reencontrará con todo el sabor de la semilla de cacao y motivar a que más gente haga chocolate.
Desde entonces se enfocan en hacer chocolate desde la semilla de cacao. “Hacemos un chocolate honesto y solidario, que va desde las familias cacaoteras y plantaciones agroforestales con las que colaboramos, hasta los ingredientes que ocupamos, junto con el esfuerzo y dedicación de todos los que nos rifamos.”
El Shack Attack es el producto que hicieron en conjunto, un frozen custard de chocolate mezclado con tamal de chocolate, trozos de chocolate, nibs de cacao de La Rifa y fudge de chocolate.
Un joven viñedo en Valle de Guadalupe que produce dos vinos: Sacto (cabernet sauvignon y merlot) y Pagano (grenache) que son conocidos por sus componentes, armonía e innovación.
En colaboración, crearon Shack Red o Shack White, ambos vinos orgánicos, ideales para maridar con las hamburguesas del lugar. Además, las etiquetas serán una colaboración de arte por el artista mexicano Jorge Tellaeche.
Una asociación que trabaja a favor de la justicia social a través de la prevención del delito y reinserción de niñas, niños y adolescentes para lograr un México más justo y seguro recibirá el 5% de las ventas de Oh Ma-Mey, un frozen custard de vainilla mezclado con mamey, limón amarillo y puerquito de piloncillo creado por la chef Elena Reygadas.
Una organización que impulsa el acceso sostenible a agua segura en comunidades rurales de México recibirá el 1% de las ventas de el agua embotellada que vende el restaurante.
Además, hay otros productos inspirados en México como la Malteada de Horchata con topping de obleas. ¡Santa Fresa!, un frozen custard de vainilla mezclado con mermelada de fresa de Santa Rosa, fresas, crema y trozos de galleta.
***
Shake Shack se encontrará ubicado en Av. Paseo de la Reforma 333 y estará abierto a partir del 27 de junio.
