PARA ESTA FIRMA TANTO ES IMPORTANTE AYUDAR A QUE SUS CLIENTES EXPRESEN SU ESTILO PERSONAL EN EL ESPACIO QUE HABITAN, COMO LLEVAR A CABO PROCESOS TRANSPARENTES Y CONSCIENTES.

Lunes 26/ 10 2015

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FOTOS: Aurora Corzas

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Galerias Polanco
Horacio 147, col. Polanco
México, D.F.

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ADVERTORIAL

Ante los distintos factores ambientales y sociales que afectan el planeta que habitamos, ha surgido un movimiento al que tanto marcas como consumidores preocupados por generar comunidad, buscan tener un menor impacto ambiental y desarrollarse dentro de las limitantes del comercio justo, sentando las bases de una nueva era para el diseño y su mercado.

En el 2002 surge en Brooklyn, Nueva York, un proyecto que tomando en cuenta las características previamente mencionadas, tiene el objetivo de lograr que sus clientes traduzcan su propio estilo y experiencias personales en interiores que por ende se conviertan en una extensión de ellos mismos: west elm.

Recientemente la marca ha llegado a México como parte de Williams-Sonoma, cadena estadounidense de tiendas especializadas en muebles, objetos decorativos y utensilios de cocina, que hace más de 50 años comenzará como el sueño de Chuck Williams, un amante de la cocina que abrió las puertas de su primera tienda después de viajar por Europa, para vender los extraordinarios utensilios que había recolectado.

Más allá de contar con productos que se ajustan a cualquier espacio de la casa, sofás, alfombras, lámparas, espejos, sillas, libreros, cortinas y mucho más; entre los pilares de west elm está el crear comunidad tanto con sus clientes, gente preocupada por saber qué es lo que compra y quién lo hizo; como con colaboradores, asociados y demás interesados en los procesos conscientes de fabricación y los negocios honestos, que resulten en una cadena transparente, sustentable y con un impacto positivo para el mundo.

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Apoyándose en el trabajo de artesanos expertos, west elm desarrolla productos de gran calidad que transforman de manera afirmativa tanto a quien los compra como a quien los desarrolla. Un ejemplo es Haití, donde la firma elabora sus productos de papel maché y a la par otorga talleres sobre finanzas para que los artesanos apliquen tanto en el trabajo como en la vida diaria.

Siguiendo esta línea, la marca procura la colaboración con diseñadores y creadores locales, sin importar se trate de talento emergente o nombres con una trayectoria.

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Con presencia en Estados Unidos, Canadá, Australia e Inglaterra, y ahora en Plaza Oasis, Coayacán, west elm pronto podrá ser encontrada en otros puntos de la ciudad en los cuales Williams-Sonoma próximamente estará abriendo sucursales, además de contar con la posibilidad de comprar en línea.