Las infancias trans en México

La iniciativa de Ley de Infancias Trans en el Congreso de Ciudad de México busca reconocer el derecho a la identidad de género de personas menores de edad a través de un acta de nacimiento que las y los reconozca. Al momento de publicar este texto, la iniciativa está detenida.

Soy Mónica, soy mamá (entre otras cosas) y quiero contarte cómo empezó nuestra familia.

Tengo dos hijes: Dante, un niño cisgénero de 9 años; y Pau, una niña transgénero de 6 años. Mi infancia fue un poco complicada y, por eso, siempre me dije que si tenía hijes tendría que aprender a escucharles.

Gracias a Dante aprendí muchísimo a escuchar y, cuando llegó mi hija Pau, mi sentido del oído estaba más sensible. En los primeros dos años de Pau seguí una educación “normal”: nació con pene y su género asignado al nacer fue masculino. Entonces todo era azul – Avengers, carritos, pelotas, pantalones, shorts… Todo lo que el rol de género masculino tenía que ser, siempre teniendo en mente que les guiaría con respeto,  amor y sin idealizarles para que pudieran ser lo que quisieran ser.

Después de un tiempo, Pau comenzó a pedirnos muñecas. No lo vimos mal. Son sólo juguetes. Poco antes de cumplir 3 años, había visto Frozen y usando el poco lenguaje que conocía cantaba y repetía las palabras yo, Elsa.. Nos pidió también disfraces de varias princesas y no se los negamos, pero me llamó la atención y lo compartí con mi terapeuta. Su respuesta fueron palabras mágicas: No te preocupes porque Pau te guiará. Yo no conocía mucho sobre la diversidad sexual y la diversidad de cada persona, así que tenía dudas sobre su orientación sexual, pero no estaba familiarizada con el término “trans”.

Para su cumpleaños número 3, quiso un disfraz de Elsa de Frozen. Al verla tan feliz tuve más dudas. Buscando en internet me encontré con un video de Jazz Jennings, una joven youtuber trans. Cuando leí eso, “trans”, y algo sobre “el cuerpo equivocado”, sentí angustia pensando que Pau podría estar sufriendo. Pero recordé las palabras de mi terapeuta: dejar que Pau me guiara.

Un día, mi esposo Fer bañó a Dante y a Pau. Mientras les secaba para ponerles la pijama, Pau dijo: Papi, ¿sabes que cuando cumpla 8 años se me va a caer el pene y voy a ser niña? La reacción de mi esposo fue decirle que no, que era niño, que el pene no se cae. Dante también le dijo que ambos eran niños y que el pene no se cae. Tomando en cuenta lo que había leído en línea, me preocupé porque pudiera lastimarse y mi respuesta fue diferente: el pene no se cae, pero tú puedes ser lo que quieras ser.

No era fácil. Para mi esposo, menos.

El padrino de Pau nos contó que tenía una amiga pediatra endocrinóloga que estaba trabajando con infancias trans. Nos puso en contacto y agendamos una cita. Llevamos a Pau y, después de platicar con la pediatra, ella nos explicó: Yo no puedo decir si es trans o no. Pau será quien lo nombre. Y nos contactó con una especialista más. Tania Morales, presidenta de la Asociación por las Infancias Transgénero. A sus hijes les servirá conocer la diversidad de las personas.

Para mi familia, el acompañamiento de Tania, su asociación y la Red de Familias Trans ha sido fundamental. Nosotros queríamos aprender, fortalecernos, informarnos para apoyar a nuestra hija. Nos han compartido tanta información que perdimos el miedo a aceptar. A aceptarla.

Hoy, Pau es validada por toda su familia. Por las personas en su escuela, amigues y conocides. Es una niña y es una niña feliz porque sabe que cuenta con apoyo. Hay otros detalles y procesos y miedo del mundo en el que vivimos, pero nunca miedo de quiénes son nuestres hijes.

Si quieres conocer más sobre infancias trans, te recomendamos acercarte a Fernanda Castilla Peón – Pediatra endocrinóloga, 55 5131 9039.

Asociación de Infancias Trans – , Twitter @InfanciasTrans, Instagram @InfanciasT, Facebook InfanciasTrans

Red de Familias Trans – Twitter @Familias_Red, Facebook ReddeFamiliasTrans

Que las infancias sean validadas y escuchadas siempre.