Después del consumo: un ejercicio de reflexión

Reducir, reciclar y reutilizar. Durante la educación básica en México es común aprender sobre estos tres pilares para el tratado de desechos. Mucho antes de la advertencia de la ONU sobre los estragos de la contaminación en el mundo y sus consecuencias, existían iniciativas que buscaban reducir nuestro impacto ambiental. La sugerencia era reducir nuestros desechos, reutilizar en la medida de lo posible e incentivar el reciclaje de ciertos materiales. 

Mucho se ha hablado ya del impacto de la industria de la moda en el medio ambiente. Desde lo contaminante de su producción, hasta la enorme cantidad de desechos que derivan de la misma. Pero existen otros temas que aquejan a la industria. Por ejemplo, nuestra responsabilidad social: desde ofrecer condiciones laborales justas para todos sus participantes, hasta preservar técnicas artesanales. También está el daño que ocasionamos a otras especies, somos conscientes de nuestra responsabilidad en la extinción y maltrato a diferentes animales y buscamos responsabilizarnos sobre el tema.

“Elegimos unos jeans y una t-shirt porque son el tipo de pieza que todo mundo tiene en su guarda ropa. Especialmente hablando de los jeans: es importante reutilizarlos ya que son de las prendas más buscadas y más contaminantes.” Alejandra Raw

Luv.it es una plataforma de e-commerce que agrupa a las marcas que oferta a través de pilares que reflejen los valores antes mencionados. En colaboración, invitamos a participar a diferentes diseñadores en una dinámica que invitara a la reflexión sobre nuestra responsabilidad como actores en la industria de la moda. 

“Nuestra marca fue creada bajo este concepto de respeto por el medio ambiente. Siempre buscando reducir nuestra huella, hasta lograr un impacto positivo.” Ohja

La dinámica inició con una recolecta de ropa que sus usuarios consideraran desecho. En su mayoría recibimos pantalones de mezclilla, considerando que este textil es uno de los más contaminantes por la gran cantidad de agua que interviene en su teñido. En segundo lugar playeras de algodón, cuyos plantíos han afectado hectáreas de terreno, además de las alteraciones genéticas que se han realizado para acelerar su cultivo y cosecha para así satisfacer la alta demanda. 

El segundo paso fue entregar lo recolectado a los diseñadores, quienes siguiendo su filosofía emplearon las prendas para crear nuevos diseños. Caralarga optó por someter las piezas a procesos experimentales, desde crear una especie de terciopelo deshilando el textil original, hasta tiñendo con residuos de producción de cerveza para lograr nuevos resultados. Otras marcas optaron por la intervención de las piezas sin someterlas a procesos. Se unieron camisas para crear pantalones –Eilean Brand-, o se emplearon pantalones para hacer abrigos –Lørdag & Søndag-. Alejandra Raw intervino un par de piezas con mensajes para crear conciencia y Ohja usó materiales propios para crear un bolso, el cual forró con una de las chamarras. Binge Knitting deshilo también los textiles, para realizar un bolso tejido.

“La experimentación con el desperdicio y la basura nos lleva a la resolución de nuevos materiales, y nos da un poder nuevo de creación.” Caralarga

Por último, recibimos las piezas para realizar una editorial que mostrara los resultados. Se invitó a Mermanegra y Almar para acompañar el estilismo de la sesión, marcas mexicanas de producción local. También se emplearon prendas de mezclilla de C&A de su campaña Wear the Change, la cuál reduce en un 80% el impacto ambiental en su producción y garantiza un mayor tiempo de vida al promedio.

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Agradecemos a Público y las agencias Bang y Wanted por las facilidades otorgadas para la realización de esta historia.