ALGO QUE COMENZÓ CÓMO UN NEGOCIO FAMILIAR, AHORA SE SIENTE CÓMO EL HOGAR DE TODOS QUIENES LO VISITAN.
Martes 29/11 2016
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FOTOS: Steve Solórzano
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Río Guadalquivir 31, Col. Cuauhtémoc
Ciudad de México
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Con casi tres años de abrir sus puertas al público, Valentina se ha convertido en mucho más que una cafetería de especialidad. Es una comunidad que siempre trabaja con productores locales y se acompaña con sus clientes frecuentes pues todos ellos disfrutan de un lugar en el que se sienten como en casa.
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Nueve formas diferentes de preparar un café americano o un capuchino son algunas de las maneras en las que Valentina apapacha a sus clientes y que la convierte en una cafetería de especialidad diferente pues también, cuida cada detalle del café que sirven: desde el productor, el grano, el tostado, la molenda y el gramaje que se sirve, hasta la temperatura del agua en la taza.
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En Valentina se les trata como amigos no como clientes, se les trata con amor en todo lo que se hace, desde una taza de café hasta la comida que se sirve.
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Pero las bebidas no son su única especialidad, la calidez también es una de ellas. Es un espacio en el que buscan dar más que un simple café, quieren envolver a los visitantes en sensaciones y aromas que permitan una experiencia agradable en este lugar, algo así como recibir a cada uno de sus clientes con un calor hogareño y sobre todo con mucho amor.
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