Un testigo de la arquitectura antisísmica en México: Ámsterdam 270 al borde de la extinción

El arquitecto Juan José Díaz Infante Núñez propuso una alternativa constructiva tras la pérdida que se sufrió en el terremoto del 85, por lo que decidió comprar un terreno en la calle de Ámsterdam 270 para construir una casa/laboratorio de arquitectura y probar miles de formas en las que se puede edificar a prueba de terremotos, resolviendo la problemática de la cimentación en México.

Con diferentes materiales a los usuales para la construcción, el proyecto fue creado con base a tubos de acero soldados y cage structure para realizar un diseño antisísmico. Durante el experimento se emplearon múltiples estudios, cálculos matemáticos y diseños para consolidar Kalikosmia, nombre de dicho trabajo; y es por eso que desde que fue construido ha sido considerado como monumento histórico clasificado nivel 1 por la SEDUVI.

Hace varios años, el terreno fue adquirido por una inmobiliaria que ha querido construir un edificio de departamentos sin importar la protección de este recinto y recurriendo a una demolición hormiga, es decir, que desde hace tiempo han desmantelado la casa evadiendo restricciones implementadas por la Secretaría. Esta destrucción se ha acelerado las últimas semanas con la excusa de ser riesgoso a causa del último terremoto que se vivió el 19 de septiembre, pero del 2017.

Hay que destacar que la vivienda de Juan José Díaz fue ideada para investigar y generar una edificación que minimizara los impactos tras un temblor y de cierto modo, protegida para no modificar el predio. Esto es una invitación para no seguir permitiendo la desaparición de Kalikosmia y salvar un monumento histórico que funge como registro de la experimentación e investigación de la arquitectura en nuestro país.