Es que… esto ya está muy visto en el arte

El medio del arte visto desde el exterior puede parecer un mundo complejo, presuntuoso e incluso superfluo; donde un grupo de personas gastan su tiempo (y su dinero) para ir a eventos saturados de individuos dentro de espacios cerrados de donde cuelgan pinturas de sus muros, mientras se  sostienen copas de vino en las manos y se utiliza un lenguaje rebuscado para denotar una cierta sapiencia, en una sala de exhibición atestada de gente que permanece durante horas de pie, con el fin de “pertenecer” al grupo exclusivo. 

Para los que transitamos por este medio, el del arte y su mercado, sabemos que la visión antes mencionada no es del todo cierta.

El arte y sus exhibiciones van mucho más allá de un acto banal y jactancioso, son muestras del talento humano. Son representaciones de los sentimientos más esenciales de las personas, son el testimonio de una época y calan profundo en la mente de los observadores, conformando lo que en algún punto se estudiará dentro de la historia del arte en el futuro próximo. 

Sin embargo cuando decimos que no es del todo cierto, es porque algo de cierto hay en eso. Y “eso” a lo que nos referimos son algunas prácticas que se hacen ya de manera automática. Imaginemos por un momento que estamos ahí, en esa sala de museo o galería llena de gente, luciendo sus mejores vestimentas y amontonándose alrededor de pinturas o esculturas bien iluminadas. 

Es en ese momento donde se pueden escuchar diferentes frases expelidas de los labios de los destacados asistentes, “Eso no es arte”, “Un niño de 4 años podría hacerlo”, “Que se habrá tomado para hacer eso”, “Pues con esos precios, yo también me hago artista”, “Eso ya lo había hecho fulano hace 20 años” y “Es que…esto ya está muy visto”, son algunos de los ya desgastados y sobre utilizados dichos que ambientan las exposiciones.

Entonces ¿Hacia dónde debemos voltear a ver? 

Esperamos que cada visita, cada recorrido y cada pieza sean una experiencia novedosa, única y brutal, que cambie nuestra percepción del mundo. Nuestro nivel de exigencia al pararnos frente a una obra de arte es tan alto, que no puede ser menos que impresionante en cada una de sus partes y de no considerarlo así, no vale la pena gastar nuestro valioso tiempo y atención en ello. 

Sabemos de buena fuente que este fenómeno no es exclusivo del medio del arte contemporáneo, sino que se da dentro del consumo de otras formas de expresión, como el cine, la televisión, el streaming, los contenidos digitales, la música, entre muchas otras. Nos volvemos jueces antes que consumidores y lo decimos de propia voz, eso nos ha impedido disfrutar una experiencia, ya que nos viciamos y no nos permitimos experimentar situaciones distintas. 

Es así que nace la muestra “Es que… esto ya está muy visto”, donde buscamos cuestionarnos el cómo nos desenvolvemos en los espacios de exhibición y como analizamos lo que consumimos en este medio; de modo satírico y con mucha ironía invitamos a los visitantes (y nosotros mismos) a bajar nuestras murallas y volvernos más críticos con nosotros mismos a repensarnos como espectadores. 

En el marco del FIRST GDL ART WKND (el fin de semana del arte en Guadalajara) es que se decide presentar esta propuesta, compuesta por 11 artistas; Joao Rodríguez con su Op Art en pintura y gráfica, “CatMynt” que presenta el Pin Up con un toque Kawaii en gráfica y Art Toy, Sinuhé Villegas con su introspección en la brutalidad del óleo, Hugo Gutiérrez “90114” quien a través de sus murales encierra pinturas que hablan de tradición y mexicanidad; por otro lado aparece Gerardo Pontiérr que haciendo uso de los bloques LEGO narra historias en varias dimensiones, Manuel Ruelas nos muestra la visión del “Chicano” con la nobleza de la linografía. 

Mientras que Jorge Morán plasma sus seres deformados con la tridimensionalidad de sus esculturas a la par de Carolina Melón con su cerámica donde aparecen personajes que son tiernos y escalofriantes por igual; la renovada voz de Zamid Saab con sus declamaciones por medio del videoarte y su obra en papel, así como la fresca visión de Ludwig Khole que se cuestiona los principios filosóficos del SER, mostrándolos en instalación, pintura, escultura videoarte etc. 

Y finalmente, Sofía Crimen con sus esculturas referentes a temas reflexivos pero vistos a través del cristal de la infancia. 

Todo ya se ha visto.

Todos estos discursos se unen para que el  espectador mire, hacia todo aquello que “ya se ha visto”. Desde tiempos antiguos, las narraciones occidentales nos han atraído las mismas tipologías de historias, las tramas universales de los griegos se repiten hasta la actualidad, vistas a través de diversos medios mostrando tener una misma base pero resultando sumamente diferentes en su resultado final. 

Creemos que ahí recae lo importante de esta reflexión: Todo ya se ha visto, la diferencia es como se muestra. Como dice el dicho popular: “ya no hay nada nuevo bajo el sol”, lo cual es cierto, pero la creatividad nos permite romper los límites de lo antes mostrado, para darle un giro y verlo desde otro ángulo. 

Con esta idea queremos reflexionar contigo, piensa en esto cada vez que vayas a una exposición y abandona en la entrada esas frases o prejuicios, quitándote de la espalda las ideas de cómo se supone que debe ser una exhibición, de cómo debes comportarte en ella, de cómo se debe de exhibir o de que debería decir el artista. Solo así podremos liberarnos de esos sesgos que nos impiden conectar de manera profunda con las obras y los artistas. 

Si desean conocer y encontrar nuevos significados de esta muestra, los invitamos a conocer Galería Bruna ubicada en Lerdo de tejada #2420, Col. Lafayette, Guadalajara, Jalisco y, ustedes mismos expresen: “Es que…esto ya está muy visto”.

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Texto en colaboración con Galería Bruna por el Hist. Del Arte Alberto Ramos  y la Rest. Maythé Loza.