¿CÓMO SE VE EL RETRATO DE UNA CIUDAD PERDIDA COMO TENOCHTITLAN? REIMAGINARLA Y RECREARLA FUE LA MISIÓN DEL HOLANDÉS THOMAS KOLE
Cierra los ojos por un momento y trata de imaginar una urbe que existió hace 500 años. ¿Puedes? El cielo es claro y el aire es frío, húmedo. A donde sea que voltees, te encontrarás con barreras de agua, y para salir de la isla tendrás que navegar en la laguna. El modo de transporte no es el auto ni el caballo: es la canoa. ¿Reconoces este lugar? Seguramente suena a un paraíso natural, pero sólo se trata de un retrato hablado de Tenochtitlan, la cual extendía sus brazos en lo que hoy conocemos como Cuenca de México.
Esta misma ciudad es la que vivía en la mente de Thomas Kole cuando inició su Retrato de Tenochtitlan, un proyecto que nació desde la más genuina curiosidad por una cultura que estaba muy, muy lejos. A casi 10 mil kilómetros de distancia y medio milenio hacia el pasado, la capital imperial mexica cautivó al europeo, quien realizó una reconstrucción 3D desde su pequeño y nevado departamento en Amersfoort, Países Bajos.
La máquina del tiempo
Es sorprendente cómo en un par de minutos puedes explorar un trabajo que a Kole le tomó aproximadamente año y medio de su tiempo libre. El sitio web que contiene el trabajo del artista digital es sólo una pequeña ventana al mundo que se fue desarrollando dentro de su computadora.
Antes de que el tiempo fuera consumido mayoritariamente por renders y modelos, Thomas le dedicó horas a mandar correos a historiadorxs, arqueólogxs, filológxs y toda persona cuyo nombre encabezara investigaciones sobre la antigua Tenochtitlan. A través de redes sociales, también, se encontró con dos otras personas que serían claves para que el proyecto llegara a su resultado final.
Un retrato de Tenochtitlan a seis manos
Andrés Semo cuenta que no recuerda muy bien cómo fue el primer contacto con Thomas, quien estaba en búsqueda de un perfil muy particular: alguien que pudiera obtener imágenes de la Ciudad de México desde el aire. Encontró a un fotógrafo con dron.
Gracias a la colaboración entre Andrés y Thomas, el Retrato de Tenochtitlan presentado en septiembre de 2023 es más que sólo una recreación; es un espejo y un portal que nos permite comparar la traza de la CDMX con los canales de Tenochtitlan. Spoiler: algunas de las avenidas más grandes de hoy eran los canales principales de la época prehispánica.
Y la cereza del pastel está en las traducciones del inglés al español y del español al náhuatl clásico que realizó Rodrigo Ortega. En varias entrevistas, Thomas ha comentado que esta parte, aunque vino al final, era indispensable para el proyecto. Que las personas puedan acceder hasta a la lengua que se escuchaba en la gran ciudad (o algo muy parecido, al menos) convierte a este sitio web en una verdadera máquina del tiempo.
Mirar el pasado para pensar en el futuro
Esta reconstrucción fue una sorpresa para muchas personas y conmovió a otras tantas. Imaginar que un lugar lacustre, lleno de canales y fuentes de agua dulce y salada es hoy una ciudad que se enfrenta a la escasez, es impensable. Cuando la realidad supera la ficción, lo único que podemos hacer es echar a volar la imaginación. Para crear nuevas posibilidades es necesario mirar la capital del imperio y la capital del país, encontrando el punto en que se unen ambas porque, si nos fijamos bien, no son tan distintas como creemos.
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Lydia Leija es lingüista, divulgadora científica y cineasta. Amante de las diversidades en todas sus formas.
IG: @lydia.tragedia
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