UNA FIRMA DE JOYERÍA MEXICANA CON UNA VISIÓN ÚNICA SOBRE ESTA DISCIPLINA QUE OFRECE PIEZAS ANDRÓGINAS CON UN MENSAJE PODEROSO Y SIN PREJUICIOS.

Visualizamos una sociedad madura que acepte a las personas tal y como son; creando joyería andrógina pretendemos abrir el espectro de posibilidades para quien guste portarlas sin temor a los prejuicios.

Jacobo Toledo

Inicia como un juego, cuando Raian V. Jacobo y Manuel H. Toledo se conocieron en el grupo de danza de la universidad, “por ser de diferentes generaciones nunca habíamos trabajado juntos, y como un juego empezamos a armar piezas de joyería con pedacería de acrílico y MDF”, las piezas que resultaron de ese juego se convirtieron en su primera colección y ya que ambos sentían afición por el mundo de la moda, decidieron a armar un proyecto juntos, “durante 2012 desarrollamos el proyecto en la incubadora de empresas del Tec y así fue como comenzó todo”.

¿A qué retos se han enfrentado como emprendedores?

El primer reto fue transformar la idea en una empresa real con recursos limitados, pero nos abocamos e invertimos todo nuestro tiempo y esfuerzo para que fuera posible; tuvimos que hacer cosas que no teníamos ni idea que eran parte del funcionamiento básico de cualquier empresa y fuimos aprendiendo un poco de todo sobre la marcha.

¿Qué es lo que disfrutan más de su trabajo?

En general disfrutamos mucho nuestro trabajo, ser nuestros propios jefes y tener el control absoluto de nuestros horarios y proyectos es algo que no cambiaríamos por nada. Además de eso, la parte del Estudio de Diseño, en donde realizamos piezas bajo pedido es muy gratificante; nos mantiene diseñando algo nuevo cada mes, nos permite conocer más de cerca a nuestros clientes y escuchar sus historias para plasmarlas en una joya. Es muy frecuente que nos pidan hacer anillos de compromiso o alianzas de matrimonio; los proyectos son tan diversos como las historias detrás de ellos.

¿Tienen una pieza con la que se identifiquen más?

No sé si nos identificamos específicamente con esta pieza, pero le tenemos mucho aprecio. El “Broche Antonio” tiene muchos elementos de lo que nos interesa plasmar en nuestras piezas; la simplicidad estética reforzado por un mensaje que justifica la forma y el uso de la pieza; al ser un broche es una pieza que no tiene género y se lleva cerca del corazón; es una pieza lúdica que habla de apreciar las pequeñas alegrías y nos recuerda la fragilidad de la vida.

¿En qué se inspiran para sus colecciones?

Además de ser piezas pensadas sin género, tratamos de darle un concepto teórico bien sustentado a todas nuestras colecciones investigando a fondo el tema que vamos a abordar en la colección. Nuestros temas surgen de inquietudes que tenemos en nuestro día a día y de la visión que tenemos de un mundo más abierto en el que se celebre a las personas por ser auténticos.

¿Qué es lo más importante que han aprendido?

A siempre ser profesionales y separar el trabajo de la vida personal. Siendo responsable de tu propio proyecto es muy fácil perder esa línea, aunque aún seguimos llevándonos trabajo a casa y trabajando los fines de semana de vez en cuando; hemos aprendido a estructurar nuestra rutina para que estar bien enfocados cuando se trata de trabajo y también relajarnos al final de cada jornada para no quemarnos.

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Un talentoso dúo que admiramos y respetamos por el gran trabajo que realizan dentro de esta industria. Síguelos en redes sociales para conocer más sobre ellos y las colecciones que están desarrollando.



  • TEXTO: Abigail Quesnel

  • FOTOS: CHMX

Fecha de Publicación:
Martes 25/07 2017